receta de palmeritas de hojaldre

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Algunos días parece que se levanta uno con el pie izquierdo. Y así me pasó el viernes.

1. Me desperté de pura casualidad para darme cuenta de que el móvil no se enciende.

2. La niña se empeñó en desvestirse justo antes de salir a la guardería. Las técnicas persuasivas no sirvieron de nada. Le embutí los pantalones en el pasillo al ascensor, el chaquetón saliendo del mismo ancensor y el gorro en la calle.

3. Salí pitando a toda leche, corriendo por el metro y la calle, hasta llegar a la guarde. Parecía y todo que había ganado algo de tiempo. Pero cómo no, cuando más lo necesitas, el metro se para en el túnel por minutos que parecen horas y así es, entrando por la oficina, cabeza agachá, 15 minutos tarde. A lo mejor no parece mucho, pero la puntualidad inglesa de mis jefes es acérrima.

4. Por fin me enteré de qué es lo que pasaba cuando se me cayó el monedero, dejando rodar todos y cada uno de los céntimos que he acumulado durante años. Porque, a ver quién los utiliza, con el tiempo que se tarda en contar la pila que se necesita para pagar un café. A menos que no te importe tomarte el café frío.

 Y es entonces cuando me dijo un compañero que "¡menudo viernes 13!" En Reino Unido el viernes 13 es el equivalente a nuestro martes 13. Pues yo estaba dispuesta a demostrar que estas supersticiones son tonterías.

5. Y en eso estaba pensando yo cuando volvía a casa de recoger a Abril de la guarde. De repente me acordé que se me ha había olvidado su tratamiento para la dermatitis en la guarde. Otros 40 minutos de ida y vuelta, con sus escaleras no mecánicas de metro (gracias ingenieros de accesibilidad) y su paseo hasta la guarde.

6. Por si faltara algo, de vuelta, cuando pensaba que ya nada podía ir a peor, cayó el chaparrón del siglo. Abril peleándose con el plástico del carro, se empapó. Y yo, sin paraguas, caladita hasta la médula.

Me río yo de estas tonterías de supersticiones. Son coincidencias de la vida, y así lo pensaba, si no fuera porque... 

7. ...el ipad no paró de apagárseme y ¡tuve que escribir 3 veces el post de esta receta!

En un día de estos que la suerte no está de cara, apetece comerse algo rico y sencillito. Encender unos minutitos el horno y disfrutar al poco de unas mini palmeritas de hojaldre. Por no decir que es un triunfo con los peques. Esta recetita va para la peque más golosa de la familia, Daniela. Es un lucero cargado de sonrisas, ¡seguro que de buena suerte va servida!

Receta de palmeritas de hojaldre

Tiempo de preparación: 20 minutos
Tiempo de cocción: 15 minutos
Total: 25 minutos
Porciones: 6 personas

Ingredientes

- 1 plancha de hojaldre (si te animas a hacer el hojaldre, aqui puedes ver la receta de hojaldre invertido)
- Azúcar

Preparación
1. Se precalienta el horno a 200ºC.

2. Se extiende la plancha de hojaldre. Se esparce azúcar por ambos lados, pasando suavemente un rodillo para dejarla incrustada en el hojadre.

3. Se enrolla por los dos extremos hacia el interior hasta crear forma de corazón.

4. Se cortan rodajitas de medio centímetro.

5. Se disponen en una bandeja con papel de hornear y se hornean durante 15 minutos hasta que estén doraditas.